EXISTIERA
de un modo que no fuese alucinación dispersa de agonía
COMENZARA Y CESARA
ensordeciendo que negado y cerrado cuando aparecido
por fin
por alguna profusión extendida como rareza
SE CIFRARÁ
evidencia de la suma a poco que una
ILUMINARA
EL AZAR
Cae
la pluma
rítmico suspenso del siniestro
sepultarse
en las espumas originales
otroras donde se sobresaltó su delirio hasta una cima
marchitada
por la neutralidad idéntica del abismo
NADA
de la memorable crisis
o fue
el acontecimiento
cumplido en vista de todo resultado nulo
humano
NO HUBIESE TENIDO LUGAR
una elevación ordinaria hacia la ausencia
QUE EL LUGAR
inferior chapoteo cualquiera como para dispersar el acto vacío
abruptamente quien si no
con su mentira
habría fundado
la perdición
en esos parajes
de la vaguedad
en la que toda realidad se disuelve
EXCEPTO
a la altura
TAL VEZ
tan lejos como un lugar
fusiona con más allá
fuera del interés
en cuanto a él señalado
en general
según tal oblicuidad por tal declividad
de fuegos
hacia
ha de ser
el Septentrión también al Norte
UNA CONSTELACIÓN
fría de olvido y de deshábito
no tanto
como enumera
en alguna superficie vacante y superior
el choque sucesivo
sideralmente
de una cuenta total de formación
velando
dudando
rodando
brillando y meditando
antes de detenerse
en algún punto último que lo consagra
Todo pensamiento emite un Tirar de Dados.
Mallarmé, Stéphane; Un coup de dés, Obra Completa en Poesía, Tomo II, Ed. Bilingüe, 1978, Barcelona.
jueves, 2 de septiembre de 2010
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